Si tengo al Espíritu Santo, ¿Para qué necesito la biblia?

Si tengo al Espíritu Santo, ¿Para qué necesito la biblia?

“Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, Él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho.”
(Juan 14:26)

“Él me glorificará, porque tomará de lo mío y os lo hará saber.”
(Juan 16:14)

Hubieron personas en las épocas antes de la venida de Cristo que habían conocido a Dios y escuchado su voz. Estos dejaron por escrito un relato confiable que enseña quién es Dios y lo que Él espera de los dicen confiar en Él.

Jesucristo, Dios mismo encarnado, hizo milagros y enseñó quién es Dios Padre, quién era Él y cuál sería el rol del Espíritu Santo. Jesús prometió que el Espíritu Santo ayudaría a sus discípulos a recordarse de lo que Él había dicho.

En nuestros días no podemos recordarnos de lo que Jesús dijo e hizo durante su ministerio en la tierra porque no hemos caminado físicamente con Él. Sin embargo, sus discípulos, testigos que presenciaron sus milagros y oyeron sus palabras, dejaron estos detalles por escrito para nosotros en los libros del Nuevo Testamento.

I Juan 2:27 indica que, como tenemos el Espíritu Santo, no tenemos que depender exclusivamente de la enseñanza de otras personas para nuestro crecimiento espiritual. Pero Juan, el mismo autor, escribió todo una biografía de la vida de Jesús (como lo hicieron también Mateo, Marcos y Lucas) para que tuviéramos la información necesaria para conocer quién es nuestro Salvador, lo que Él ha hecho por nosotros y lo que desea hacer en y a través de nuestras vidas.

Lucas, el autor del Evangelio y del libro de Hechos, nos explica la importancia de tener y consultar un escrito preparado cuidadosamente. Él inició su biografía de Jesucristo con las palabras: “Por cuanto muchos han tratado de compilar una historia de las cosas que entre nosotros son muy ciertas, tal como nos las han transmitido los que desde el principios fueron testigos oculares y ministros de la palabra, también a mí me ha parecido conveniente, después de haberlo investigado todo con diligencia desde el principio, escribírtelas ordenadamente … para que sepas la verdad precisa acerca de las cosas que te han sido enseñadas.”

Lucas, el autor del Evangelio y del libro de Hechos, nos explica la importancia de tener y consultar un escrito preparado cuidadosamente. Él inició su biografía de Jesucristo con las palabras: “Por cuanto muchos han tratado de compilar una historia de las cosas que entre nosotros son muy ciertas, tal como nos las han transmitido los que desde el principios fueron testigos oculares y ministros de la palabra, también a mí me ha parecido conveniente, después de haberlo investigado todo con diligencia desde el principio, escribírtelas ordenadamente … para que sepas la verdad precisa acerca de las cosas que te han sido enseñadas.”

Es por medio de nuestra lectura y estudio de la Biblia que el Espíritu Santo nos enseña y nos “recuerda” de lo que Dios ha dicho.

Escrito por:
Docente Seteca

Otros artículos de interés:

Este mito refleja una lamentable tradición cultural del materialismo histórico y posiblemente ante la era de la técnica.
A continuación, ofrezco algunos principios que pueden ayudar a responder tu pregunta.
Si queremos dedicarnos a la predicación, la enseñanza, la ministración espiritual de consejería y cuidado pastoral, es mucho mejor si apartamos un par de años de nuestra vida y nos concentramos en los estudios teológicos.
¿Necesitas más información?